Woman being treated by cataract specialist using eye care equiptment

La cirugía de cataratas y la extracción de cataratas en la actualidad son procedimientos seguros, efectivos y bastante comunes. De hecho, si te han dicho que tienes una catarata, definitivamente no estás solo. Cada año, más de 2.5 millones de personas en los Estados Unidos se someten a cirugía de cataratas.

Gracias a los avanzados procedimientos quirúrgicos y la tecnología de implantes de lentes, la cirugía de cataratas no solo es uno de los procedimientos quirúrgicos más frecuentemente realizados en los Estados Unidos, sino que también es uno de los más seguros y exitosos. La cirugía de cataratas la realiza un especialista en cataratas de manera ambulatoria y, por lo general, sólo requiere unas pocas horas de tu tiempo desde el inicio hasta el final.

¿Qué son las Cataratas y qué las causa?

Una catarata ocurre cuando el cristalino, normalmente transparente, de tu ojo, se vuelve opaco. Esto se debe a que las proteínas de tu cristalino se descomponen y se agrupan. Esta opacidad del cristalino puede hacer que los objetos y las personas se vean borrosos, nebulosos o menos coloridos. Este es un proceso natural que puede ocurrir a medida que envejeces. De hecho, más de la mitad de las personas mayores de 80 años tendrán cataratas o habrán pasado por una cirugía de cataratas.

Las cataratas generalmente se desarrollan lentamente y se pueden manejar con una iluminación más fuerte y gafas. Sin embargo, las cataratas más avanzadas pueden dificultar la realización de actividades diarias como leer o conducir (especialmente de noche). Una vez que tus actividades diarias se ven afectadas por las cataratas, debes considerar la cirugía de cataratas, que se explica a continuación.

¿Cómo se diagnostican las cataratas?

Aunque las cataratas a menudo son el resultado de procesos relacionados con la edad, también pueden desarrollarse por otras razones. Es posible desarrollar cataratas por una lesión o después de otra cirugía ocular. Sin embargo, no hay evidencia de que las cataratas se propaguen de un ojo al otro.

Para recibir un diagnóstico oficial de cataratas, necesitas programar una cita con tu oftalmólogo para un examen ocular. Como parte del examen, el oftalmólogo puede realizar un examen ocular dilatado, un examen con lámpara de hendidura y pruebas de refracción y agudeza visual. Una vez que recibas tu diagnóstico, tu médico te guiará a través de las opciones de tratamiento y discutirá si la cirugía de cataratas es adecuada para ti.

¿Cómo se realiza la cirugía de cataratas?

Hoy en día, la cirugía de cataratas es bastante cómoda. Primero, el especialista tratará tu ojo con un anestésico para que sientas poco o nada durante la cirugía, y molestias mínimas o nulas.

El especialista opera mirando a través de un microscopio altamente especializado, diseñado exclusivamente para la extracción de cataratas. Se realiza una pequeña incisión, de menos de 3 mm, en el borde de la córnea.

A través de esta diminuta incisión, se inserta una sonda ultrasónica microquirúrgica oscilante que fragmenta suavemente el cristalino opaco usando ondas de sonido de alta frecuencia. Simultáneamente, este instrumento aspira los fragmentos. Este proceso se llama “facoemulsificación”. La cápsula posterior, una membrana elástica similar a una bolsa que sostenía el cristalino, se deja en su lugar.

Una vez que se eliminan todos los fragmentos de la catarata, se inserta un nuevo lente transparente plegado a través de la pequeña incisión y se permite que se abra dentro de la cápsula posterior.

El procedimiento generalmente toma de 20 a 30 minutos y se realiza de forma ambulatoria. Esto significa que te someterás a la cirugía de cataratas y luego regresarás a casa, generalmente unos 30 minutos después. La mayoría de las veces, solo se utiliza anestesia local, por lo que estarás despierto durante todo el tratamiento. Después de la cirugía, serás llevado a una sala de recuperación y luego dado de alta. Necesitarás que alguien te lleve a casa.